ÚRSULA
Trabajo sexual
es trabajo.
Todes vendemos nuestro esfuerzo físico, mental y emocional a cambio de un salario. En el caso de les trabajadores sexuales que ejercemos libremente elegimos cuando, con quien, donde y lo que cobramos pero estamos en una sociedad hipócrita y puritana donde no solamente no se reconoce nuestro trabajo, sino que se nos persigue, se nos criminaliza, se nos cancela y estigmatiza por contradecir y decidir como queremos sobrevivir a este sistema capitalista.Todo trabajo es explotación. Si se quiere abolir algo debería ser todo trabajo asalariado. Yo estoy muy orgullosa de mi trabajo, el que sustenta más de 100 animales, hay muchísima desinformación respecto a este trabajo y la verdad es que es muchísimo más que lo que habitualmente la gente conoce. Da soporte al. colectivo de trabajadores sexuales!

